Este viernes cinco muchachos federa fueron detenidos luego de que se tomaran el techo de la casa central de nuestra “querida corporación”.
La medida realizada por los chiquillos tuvo como objetivo llamar la atención de los pocos atentos medios locales y de paso abrir de una vez por todas, el nulo diálogo con el directorio.
Y pese a que al fin se obtuvo el anhelado objetivo, la movida no estuvo ausente de problemas, porque luego de un rato de ocupación del recinto, el vicerrector de gestión Agustín Quevedo subió a convencer a los cabros a deponer la toma en rectoría.
Como la misión de Quevedo fue inútil, se procedió a llamar a carabineros, quienes luego de conversar con los muchachos lograron sacarlos.
Luego de eso, los estudiantes fueron detenidos, producto de una orden del “tío Cubillos”, y llevada a cabo por las fuerzas especiales verdes.
Y aunque hubo detenciones, esto no importó para los chiquillos pues obtuvieron lo que querían, o sea el dialogo con rectoría durante la toma.
Frente a esto, la estudiante de periodismo, Camila Ceverio, quién fue detenida por este hecho y luego puesta en libertad, aseguró que la toma valió la pena porque se están acercando las dos partes.
Paradójicamente, esta forma de obtener dialogo con la universidad no fue una medida acordada en ningún consejo de estudiantes, sino más bien una decisión personal de los autores.
Esto lo destaca Ceverio, ya que según sus palabras, nunca quisieron afectar la movilización que llevan nuestros compañeros en ambos Campus.
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